El presidente de Rusia, Vladimir Putin, dijo este martes al jefe de la agencia de vigilancia nuclear de las Naciones Unidas que la situación en la central nuclear ucraniana de Zaporiyia es «preocupante», y añadió que Moscú estaba «abierto» al diálogo.
«Vemos que hoy hay elementos de una politización excesivamente peligrosa de todo lo relacionado con la actividad nuclear. Tenemos muchas esperanzas de que, gracias a sus esfuerzos, podamos reducir toda la retórica y normalizar este ámbito de nuestra cooperación, a pesar de todas las turbulencias y los complejos procesos que están teniendo lugar en la escena mundial», dijo Putin antes de su reunión con Rafael Grossi, director general del Organismo Internacional de Energía Atómica, en San Petersburgo.
Putin añadió que está «encantado» de discutir «todas las cuestiones que nos interesan mutuamente y que incluso pueden preocupar a alguien». Bueno, también a nosotros. Por ejemplo, en lo que respecta a la situación en torno a la central nuclear de Zaporiyia. En cualquier caso, estamos abiertos a este diálogo y nos alegramos de verle».
Grossi dijo que su debate de hoy es «muy importante e indispensable», ya que «tenemos cuestiones que tienen que ver con la seguridad nuclear, la seguridad nuclear en particular en la central nuclear de Zaporiyia».
«Como sabe, he estado desplegando esfuerzos para intentar evitar un accidente nuclear que podría ser muy perjudicial en términos generales y en particular en la región», dijo Grossi a Putin.
